Hoy, domingo 22 de
mayo, se celebra el día mundial de la biodiversidad. Claramente no es un tema
que llame la atención masiva del público. Entre tantos problemas sociales,
económicos, políticos, laborales y cotidianos, es fácil soslayar que debemos
nuestra subsistencia a la biodiversidad del planeta y a los servicios que nos
brinda.
En 2001, la
Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) proclamó este día como día
internacional de la diversidad biológica con el propósito de concienciar a la
población y a los Estados sobre la importancia de conservar la biodiversidad.
Muchas de las
personas que viven en las grandes ciudades, como la nuestra, no tienen un
estrecho contacto con el entorno natural y las especies silvestres. La
biodiversidad, entonces, parece algo lejano a la ciudad. Algo que está “en otro
lado”. Sin embargo, numerosas ciudades argentinas tienen pequeñas áreas
protegidas donde la biodiversidad es realmente sorprendente, sobre todo si
consideramos que estas reservas naturales se encuentran dentro del ambiente
urbano.
Mar del Plata
tiene una sola reserva urbana, la Reserva Provincial Puerto Mar del Plata. Un
espacio silvestre por cuya protección han luchado durante años organizaciones
de la sociedad civil apoyadas por -digamos- gran parte de la sociedad local.
La defensa de esta
pequeña reserva natural urbana dividió a los marplatenses, entre aquellos
interesados en proteger la gran diversidad natural de este espacio y, aquellos
otros, que –sin conocer el lugar- se oponían con diversas excusas
desarrollistas y se negaban a aceptar la importancia de la alta biodiversidad
del área.
Más allá de lo
anecdótico, lo cierto es que la Reserva Puerto MdP es el sitio con mayor
biodiversidad registrada del Partido de General Pueyrredon. Numerosos estudios
científicos así lo indican, a pesar la negación de sus detractores.
En 2014 la Reserva
Puerto fue finalmente declarada RESERVA PROVINCIAL por medio de la
ley 14.688
de la Provincia de Buenos Aires. Aún se está esperando la reglamentación de la
ley para que la protección del área sea efectiva y concreta. Por ahora, a pesar
de muchas buenas intenciones y promesas, el espacio natural más importante de
nuestra ciudad (desde el punto de vista de la biodiversidad y los servicios
ambientales) se encuentra abandonado y a la espera de que el Organismo
Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS) se haga cargo de su control y
vigilancia. Hasta que esto no suceda, lo cierto es que la Reserva es, como
muchas otras reservas de nuestro país, una “reserva de papel”.
En su
mensaje con
motivo de la celebración 2016 de esta fecha, el Secretario General de las
Naciones Unidas, Ban Ki-moon afirmó:
“En este Día Internacional de la Diversidad Biológica, insto a todos
los gobiernos y a las partes interesadas a preservar y gestionar de manera
sostenible la diversidad de la vida en la Tierra en beneficio de las
generaciones presentes y futuras. La preservación de la diversidad biológica es
parte fundamental del pacto que hemos suscrito entre todos y con el planeta que
nos alimenta y protege.”
Esperemos que las
nuevas autoridades del OPDS tomen en cuenta estas palabras y aceleren los
burocráticos trámites para la reglamentación de la ley y la posterior
aplicación de un plan de gestión y manejo de la Reserva Provincial Puerto MdP.
Diseño
de afiche: Ángela Ferrari
Fotos:
Alejandro D. Sánchez y María José Solis.